Vampiros alcoholizados aquí -KAZ-

Aún llevaba a KAZ del brazo cuando llegaron a la entrada del bar. Después de la última vez que se vieron había pasado un buen tiempo, las obligaciones que tenía con L'Arc y su familia aún lo apartaban de su querido amigo pero eso cambiaría esa noche. Una reunión que no era de trabajo, solo ellos dos. Era la primera vez en mucho tiempo que iban a beber como antes, cuando estaban de gira y dormían poco. También era la primera vez que hablaría con KAZ de ciertos temas... ¿por qué sentía que siempre que veía al guitarrista tenía muchas cosas que contar?

Entraron al recinto de la forma más discreta que pudo mostrar, finalmente había dejado libre a su acompañante al soltarle el brazo. Lo encaminó hasta su mesa favorita y aunque bien podrían meterse a un privado, esa noche no tenía ganas de ser "VIP". Tenía ganas de convivir con los borrachos y oler y verse como uno. Al llegar a la mesa se sentó de inmediato mirando a KAZ en espera de que le imitara. Conocía a su amigo y estaba seguro de que en ese momento no estaba muy cómodo.

-Vamos, Kazu-chan, una vez al año no nos hace daño, además sabes que la ciudad es segura. No aparecerás mañana en los diarios alcoholizado con tu vocalista- Rió divertido, mientras llamaba al mesero y cuando este llegó hasta la mesa se apresuró a ordenar. -Mmmh... para empezar, una botella de vino- Miró al menor de reojo. -Algo ligero~- Le guiñó el ojo.

No tenía una cuenta exacta del tiempo que pasó desde la última vez que se vio con Hyde. Él estaba ocupado con Laruku y en el caso suyo, con Oblivion Dust. Por razones demasiado obvias ninguno de los dos había tenido el tiempo suficiente para verse y cuando eso pasaba era ahí cuando se preguntaba, ¿cómo le hacía Hyde para convencerlo a ir a esos lugares? Era como una mala influencia o algo similar, pues claro estaba él no era santo pues en un bar fue donde prácticamente se formó Oblivion, pero visitar un bar a alcoholizarse…bueno, eso era algo que no hacía desde hacía ya mucho tiempo.

Suspiró dejándose arrastrar y sintiéndose pronto dentro de la atmosfera de borracheras e incluso de cigarros que desprendía el bar. No molestándose por prestar atención a esas cosas, se dejó arrastrar por su amigo hasta la barra donde seguido él tomó asiento. No sabía por qué, no solo tenía la intuición de que sería un buen momento, más bien algo le decía que Hyde tendría muchas cosas que contarle y él demasiadas qué escuchar. Se mantuvo en silencio a lo que el ya mencionada ordenaba y luego, se atrevió a hablar.

—Creo que ahora no me preocupa salir alcoholizado en los diarios, Hyde. —en realidad le preocupaba más el hecho de que si él no era el primer ebrio, tendría que lidiar con su amigo ebrio y eso era todo un espectáculo. —Algo me dice que hay muchas cosas que contar por todo este tiempo. —habló fijándose en quien les atendió, viendo apenas como buscaba la botella de vino junto con el par de copas.

Dejó de prestar atención al barman para girar a ver a su amigo, le sonrió ampliamente pero no dijo nada aún hasta después de que el otro dijera lo segundo. Se giró un poco sobre el banco y apoyó el codo en la barra para posteriormente sostener su cabeza con esa mano y fijarse más en KAZ.
-¿No notas nada diferente?- Preguntó sin pensarlo mucho, la noche era larga y no tenía ganas de ser prudente en la bebida, así que no perdería más tiempo y le hablaría de una vez.

El joven androide volvió a acercarse con su botella y dos copas, abrió la primera y sirvió en ambas para luego dejarla sobre la barra y apartarse nuevamente. Hyde tomó el vaso que le correspondía inclinando la cabeza hacia el empleado en modo de agradecimiento y bebió un sorbo corto.

Volvió a mirar a KAZ y con un gesto insistió. El guitarrista era un híbrido y una parte de él era de hechicero, sabía que no le costaría adivinar que ahora no era más que un simple mortal.

Como un simple gesto de agradecimiento asintió suave a quien entregó las copas en modo de agradecimiento. Seguido del vocalista tomó la copa propia, primero echándole un vistazo al líquido en el interior y después acercándola a los labios para dar un sorbo corto. Ante la pregunta de éste se quedó por unos momentos pensando. ¿Notar algo extraño? Fue sólo cuestión de segundos para que se diera cuenta. Hyde ya no era vampiro. Era un humano más como los que presuntamente los rodeaban. El gesto de sorpresa que se le quedó fue evidente y dejó la copa sobre la superficie de la barra.

—Eres humano...—fue lo que se le escapó como una primera impresión y es que, sencillamente no se lo esperaba.

¿Cómo y cuándo…? Muchas dudas lo asaltaron de golpe y es que la única forma de que hubiera sido convertido en humano era el que hubiese contactado a una bruja o hechicero. Removió el gesto de sorpresa y lo volvió a observar. Estaba tan impuesto a verlo como híbrido que el que fuera humano se le hacía extraño.

— ¿Cuándo pasó eso?—se aventuró a preguntar después de dar apenas otro pequeño sorbo a la copa.

Gustoso y satisfecho con la respuesta acertada de su compañero, alzó su copa para chocarla con la contraria sin esperar realmente a que el guitarrista le correspondiera. -Yatta!~- Lanzó un sonido de júbilo y bebió otro sorbo.
-Respuesta correcta- Respondió con exagerada alegría y sostuvo la copa en su mano pero la dejó apoyada en la mesa.

Todavía con una sonrisa escuchó su pregunta, era raro recordar todo el proceso y habían cosas que tal vez ni siquiera a KAZ le contaría, o tal vez si... vería como avanzaba la noche... -Mmmh... Ya tiene unos meses... realmente no siento que haya cambiado mucho, sabes? Y creo que no me ha costado re-acostumbrarme a la vida de humano...- Explicó aún sin entrar en detalles y sin dejar de lado aquella sonrisa.

-Aunque... a veces todavía me perturban algunas cosas... tengo la sensación de que algo no quedó bien...- Suspiró cortando lo que decía con rapidez, tal vez hablaba de más... era inevitable cuando hablaba con KAZ. -...Pero trato de ignorarlo- Añadió y alzó los hombros en un gesto como para restarle importancia al asunto, miró a KAZ. Sabía que no debía dejar aquellos presentimientos de lado y que en cualquier momento su amigo se lo advertiría, después de todo él era el que sabía más sobre eso. Realmente esa había sido la razón por la que no había solicitado precisamente de su ayuda para ese plan.

No hubo demasiado “jubilo” por parte suya ante el chocar de ambas copas, pero no por eso fue un maleducado. Sonrió apenas un poco y la llevó de nuevo a sus labios para dar el sorbo que correspondía. Aún no cabía en el asombro de que Hyde fuera humano, por que esperaba que en todo ese tiempo hubieran pasado demasiadas cosas pero no eso. Era raro y estaba seguro que tardaría en acostumbrarse a que lo fuera. Eso sí, que lo fuese no cambiaba nada y Hyde seguía siendo Hyde, cosa que lo alegraba.

Lo que sí captó su atención era el hecho de que sintiera que algo “no quedó bien”. Esa respuesta no le gustó del todo y no sabía por qué. Quizás mera intuición, pero era claro que no le gustaba para nada como se escuchaba. —Supongo que lo extraño ha sido volver a comer…o hacer cosas antes no hacías o no necesitabas. —dijo lo que pensó al respecto y es que así era como lo imaginaba. Suponía que ser humano traía ventajas como salir a la luz solar sin un anillo, comer pasando hambre de verdad y no por disimular, etc.

—Aún así, Hyde, ¿qué es eso que dices que no quedó bien?—fue imposible el no preguntarlo. Nunca le gustaba cuando algo sonaba así. —No creo que debas ignorarlo si te parece que no está bien. —dio su punto de vista al respecto, esperando saber qué era ese tanto que a Hyde no le agradaba como quedó.

Dio un sorbo largo en tanto el guitarrista hablaba casi dándole fin al contenido de su copa. Cuando se apartó el vaso de cristal de los labios y vio lo poco que le restaba, decidió bebérselo todo. Tomó la botella y con suma calma volvió a llenar su copa. -Es que la verdad no sé que es... pero a veces todavía tengo esos pensamientos...- Dejó la copa recién rellenada en la barra y dirigió su atención a su acompañante.

-Tú sabes... de hacer cosas malas. Y creo que el vampiro se fue por completo... pero la otra parte, K.A.Z...- Pensó un momento. La verdad era que todo eso de que Satanás resguardara su alma no era algo que lo hubiera dejado completamente tranquilo durante todos esos meses.
Y si, las ansias de sangre y la enemistad con el sol habían desaparecido. Bien se sabía que al ser un híbrido, en su caso de vampiro y demonio, había una parte más predominante. En cuanto a él y por muchos años, lo fue el vampiro porque así lo había decidido. Pero ahora que había recuperado su alma, tenía claro que no había nada de pureza en ella si había pasado tantos años en el mismísimo infierno.

Sonrió de medio lado. -¿Crees que debo preocuparme?- Preguntó finalmente sabiendo de antemano la respuesta de su amigo.

Spoiler:

Mientras su amigo proseguía a llenar la copa suya y hablaba, él prestó atención. Muchos quizás no lo pensarían pero quienes le conocían sabía que era una persona que nunca apoyaba esos “no me gusta como queda” y por consiguiente, le gustaba poder saber qué hacer para arreglar esos problemas. Dejó su copa intacta sólo para poder prestarle la más grande de las atenciones a Hyde y escucharlo hablar. Dentro de su cabeza comenzaba a formar conclusiones. Sabía que Hyde era híbrido y también sabía que el otro lado era el de un demonio, tal como el suyo era el de un hechicero.

Se quedó callado por unos segundos después de que el vocal terminara de hablar, pensando. Se supone que si era humano por completo no se sintiera como lo estaba haciendo. Su alma había regresado y ya no estaba en el infierno. —Es extraño, al menos si te refieres a hacer cosas de verdad muy malas. —soltó tras quedarse callado, todavía dejando la copa quieta. —Preocuparte no sirve de mucho, pero tampoco ignorarlo. —recalcó rápido para que el mayor no lo malinterpretara. —Más bien deberías averiguar, no creo que eso sea normal si es como lo imagino.—

E internamente surgió la duda, ¿y qué si algo en esa regresión no salió del todo bien? Quería pensar que tal vez era la tentación que les daba a los humanos de vez en cuando, pero por la forma en la que Hyde lo explicaba eso le daba a pensar muchas cosas.

Todavía no tocó la copa que acababa de rellenar, la dejó sobre la fría mesa y se quedó quieto, mirando el contenido por un par de minutos mientras escuchaba a su guitarrista. Cuando terminó de hablar y sin apartar la mirada del rojizo líquido, abrió la boca. -Creí que al recuperar mi alma se iría todo. Que el demonio volvería por donde vino y yo podría llevar una vida normal. Pero parece que lo único que hicieron fue devolverme la vida mortal.- Reflexionó un momento en silencio antes de continuar hablando.

Se alzó de hombros en un gesto de restarle importancia. -No sé, siempre pensé que el alma es una cuestión mental. Digo, ninguno de nosotros podemos verla...- Levantó finalmente la cara para mirar a su acompañante. -Si lo piensas, un vampiro no es más que un cuerpo sin vida pero con un contrato de permanencia, con sus reglas... y al menos yo no elegí ser uno. Un demonio es una entidad invisible pero pensante que hace lo mismo, con la diferencia de que esta puede moverse libremente e instalarse en donde le de la gana. Y creo que uno decide si le da hospedaje o no...-

De pronto se sintió mareado, tal vez por el alcohol o por todo lo que se arremolinaba en su cabeza. Miró fijamente a su amigo y sonrió, soltando una risa un tanto seca. Bebió un sorbo largo de vino y suspiró. -Sea como sea, mi cuerpo ya tiene vida, mi alma es la que me preocupa, supongo...- Alzó su copa hacia KAZ, esperando un brindis de su parte. -Si es como en las películas y la única forma de deshacerme del demonio es con un cura... creo que elijo dejarlo vivir sin pagar la renta- Chocó su copa con la ajena, con una sonrisa más amplia. No estaba diciendo que le gustara tener eso dentro de él ni esos pensamientos que a veces le robaban el sueño. Pero tal vez no sería tan malo...

Permitiendo que siguiera hablando, se puso a repasar a nivel mental lo que alguna vez leyó en libros sobre demonios. El tema no era uno que tocara demasiado seguido pero en más de una ocasión se entretuvo con esa clase de lecturas antes de proseguir con las que de verdad le interesaban. —Que regresen tu alma no significa que ella no esté corrompida, o que lo hayan hecho durante todo el tiempo que estuvo en el infierno. —quiso aclarar un poco al parecer la primera duda que tenía su acompañante. Seguido del castaño elevó la copa para así poder realizar el brindis y asintió con una suave sonrisa. Acercó esta y dio un sorbo de vino, no faltando demasiado para que la copa se vaciara pero le restó importancia.

— Aceptas que los demonios existen a pesar de que no los ves, pero a cambio crees que el alma no existe por no poder verla. Eso es muy contradictorio. —luego pensó en lo que le decía. —Los demonios por lo general poseen a la persona contra su voluntad. Son muy peculiares. —y de nuevo recordaba sobre todo lo que leyó en más de una ocasión. Era similar a cuando una persona era convertida en vampiro contra su voluntad, sólo que en esos casos era demasiado diferente a tener un demonio corrompiéndote el alma. A pesar de eso se alegró en parte al recordar que por como se expresaba, se notaba la alegría al tener vida de nuevo. Debía ser muy diferente el ahora ser humano y sentir cosas que como vampiro no se podían sentir.

— ¿Entonces te quedarás con él?—no se desconcertó pero eso lo hacía pensarse las cosas. Sólo esperaba que, como pasaba cuando Hyde era vampiro, fuera el lado humano el que dominara en esa ocasión y no el demoniaco que residía en el alma de éste. —Aunque tu cuerpo tenga vida, si tu alma te preocupa deberías pensarlo mejor. —se atrevió a agregar.—De cierto modo, es como si no fueras humano del todo al conservar ese lado. ¿Lo has pensado?

KAZ tenía razón en algunas cosas, nuevamente le dejó hablar mientras bebía insistentemente de su copa. ¿Y si su alma estaba corrompida? ¿Como saberlo? Como le había dicho, no podía verla ni sentirla... Volvió a fijar su mirada en el menor al tiempo que mencionaba lo siguiente, aparentemente relacionado con lo que estaba pensando. Cuando terminó, abrió la boca una vez más. -La diferencia es que al demonio puedo sentirlo, se hace presente mientras duermo, generalmente.- Señaló de pronto.

El barman se acercó con un pequeño plato con maní y lo dejó frente a ellos. Pero por el momento no le prestó atención, seguía mirando a KAZ. Estaba más tranquilo luego de externar aquella inquietud de días. -Mientras no me cree problemas, creo que todo estará bien.- Asintió y sentenció finalmente luego de su pregunta, tomó otra vez la botella y por tercera vez llenó su copa. Carraspeó. -Claro, creo que al final de todo sigo siendo un híbrido.- Sonrió esta vez un poco divertido y tomó un poco de botana llevándosela a la boca. Masticó con calma y luego de tragar bebió un sorbo de vino.

Dejó la copa sobre la barra apenas terminó de beber y miró el vaso como hiciera antes. -Creo que estoy bebiendo demasiado rápido- Soltó una risa algo tonta, si, signo de que ya estaba surtiendo efecto el alcohol.

De haber sabido primero ese punto, quizás la primera opinión hubiera sido diferente. Prefirió no acatar algo al respecto y vio con mera curiosidad lo que el barman colocaba frente a los dos. El maní no era una botana que soliera comer –si es que comía—pero al igual que su compañero no le prestó atención al pequeño plato. Notando que sólo faltaba cosa de nada para terminar de beber la copa, la tomó de nuevo entre manos para darle un último sorbo mientras escuchaba a Hyde hablar. —Espero que tampoco cree problemas y si los causa, busques solución. — aunque no necesitaba advertirlo, a pesar de todo conocía a Hyde y estaba seguro que éste sabía que con esas cosas no se podía jugar.

Se le escapó una risa contagiada por la del otro y tras esto tomó la botella, vertiendo vino en la copa. Esa sería la segunda que se tomaría, a diferencia del otro que ya andaba soltando esas risas algo tontas por los efectos del licor. Dejó la botella a un lado pero evitó comer maní, quizás más tarde pues ahora no le apetecía.

—Lo haces. —sonrió suave pero con un deje divertido y le dio un sorbo al vino recién servido. —Luego seré yo el que deberá cargar contigo. —se hizo la "víctima". Ver al vocalista ebrio era todo un espectáculo y lidiar con él en un estado así era similar a una odisea, odisea que no veía muy lejos a juzgar por aquella risita tan contagiosa.

-Lo haré- Confirmó aún con una sonrisa tranquila en el rostro para así buscar darse ánimos a sí mismo a la vez que le demostraba a KAZ que todo estaría bien y que le agradecía su apoyo. Dio una amigable palmada en el hombro ajeno y una nueva risa entorpecida se atropelló en su boca cuando el guitarrista dijo lo último.
-KAZ, no perderé la conciencia, te lo prometo- Acotó casi sin pensar las palabras, bebió de la copa hasta bajarle la mitad del contenido y nuevamente rió justo después de pasarse el líquido.

-Además si llego borracho a mi casa, Gackt no me dejará dormir con él- Agregó visiblemente llegando a ese estado en el que dejaba de pensar lo que decía. Dejó la copa en la barra una vez más para prestarle finalmente atención a la botana. Miró a KAZ, él aún era un vampiro... cuando él era vampiro no comía ese tipo de cosas a menos que fuera extremadamente necesario pero, ¿KAZ lo comería?

Tomó unos cuantos maníes y se los ofreció a su amigo acercándolos a su boca pero sin parecer muy imprudente o acosador. -¿A tí qué lado te domina, Ka~zu~chan?- Hizo innecesarias pausas al decir su nombre, aunque sin objetivo alguno, solo para molestarlo y la sonrisa tranquila que tuviera antes ahora era más relajada, esperó con el maní cerca de su acompañante mientras igualmente esperaba su respuesta.

Claro, no perdería la conciencia. Algo en la cabeza le decía que si no perdía la conciencia por tanto alcohol terminaría haciendo de las suyas, y es que Hyde a veces llegaba ser…impredecible. Optó por no continuar debatiéndose por si terminaría ebrio o no y sólo asentía dándole sorbos a la copa, sin saber si reírse por el modo tan ameno y despreocupado que lanzaba el comentario sobre Camui, que ahora que recordaba, era el compañero sentimental del vocal.

Alejó la cara sorprendido por el repentino acercamiento del maní. Ew, maní. No quería comer maní, por mejor decir que no necesitaba comerlo. Todavía con la cara alejada de la botana le echó un vistazo a Hyde al oírlo hablar. Esa pregunta no se la esperaba y suponía que para que lo dejara en paz, debería comerse el maní. Se mantuvo sosteniendo la copa con una mano y elevó la que yacía libre para atrapar la pequeñita botana, llevándosela a la boca como si nada y comiéndola. No le afectaba y a fin de cuentas tampoco sabía tan mal.

— Te diría que el vampiro, pero con el paso del tiempo creo que no hay uno que me domine más que el otro. —inició hablar después de tragar el maní y bebió del vino para quitarse el sabor a maní de la boca.—Por un tiempo, antes de conocerte, dominaba más el vampiro pero lo dejé “a un lado” cuando empecé a practicar magia.—explicó el por qué su punto de vista.—Siento que es raro que uno no domine más que el otro, pero creo que es lo que logré con el paso del tiempo.

Al notar la primera reacción del guitarrista no pudo evitar reír, había alejado la cara tan repentinamente como él mismo había acercado el maní a su boca. Entendía, pero no dejaba de ser divertido. Permaneció con la mano estirada más por el estado ausente en el que estaba mirando a su amigo que por insistencia. Cuando finalmente KAZ comió al maní, alejó la mano directamente hacia su copa para dar un pequeño sorbo y luego devolver su atención al menor.

-¿Antes de conocerme...?- Levantó las cejas y suspiró. Realmente se habían conocido hace poco, poco comparado con la edad que ambos tenían. -Afortunado tú que puedes hacer magia- Le miró con fingida envidia mientras bebía un poco más.

Dejó la copa en la barra por enésima vez, esta vez haciendo un ruido seco al dejarla caer y se acercó a KAZ. -¿Sabes por qué lo hice?- Soltó de pronto, como si el alcohol hubiese aumentado ligeramente su efecto y ya comenzara a sentir que soltaba la lengua más de lo debido. Y no es que hubiese bebido tanto aún, solo era la falta de costumbre...

Apenas sintió y se le escapó una risa por la envidia tan fingida de su amigo. Hacer magia era las ventajas de ser mitad brujo, suponía que era algo bueno ya que lo ayudaba con más cosas de lo usual. Aún con el “desagradable” sabor a maní en la boca bebió de la copa para ser una clase de víctima de las adivinanzas de Hyde. Estaba acostumbrado a que siempre le preguntara esas cosas, así que lejos de molestarle sólo hizo lo que se suponía que hiciera.

No era adivino por desgracia. Podría leerle la mente si quería pero no tenía esas malas costumbres. Un gesto pensativo se le formó en la cara, mirando hacia las luces artificiales que mantenían iluminado el local. Se daba una idea de por qué Hyde decidió ser humano y lo único que le venía a la cabeza era “GACKT” en luces de neón. Aún así, fingió ignorancia.

—Puedo darme una idea de por qué lo hiciste. —miró la copa que amenazaba con vaciarse en un último sorbo pero evitó llenarla para continuar bebiendo. No quería terminar ebrio a pesar de todo. —Pero, ¿por qué no me cuentas por ti mismo?

Sabía que KAZ lo sabía, estaba consciente, muy en el fondo, debajo de su borrachera en ascenso. Así que soltó una risa al escucharle decir aquello. -Si, KAZ, estás en lo correcto... sé lo que piensas y mira que ya no puedo leer la mente- Rió nuevamente bebiendo de su copa y de inmediato notando que KAZ había terminado la suya.
Sin preguntarle tomó la botella que estaba ya casi vacía y vertió lo último del contenido en la copa del guitarrista. -Después de esta podemos irnos si quieres, tampoco quiero ponerme imprudente. ¿Sabes? Hace mucho que no voy al mirador-

Mencionó, distrayéndose automáticamente del tema del que iba a hablar primero. Bebió un sorbo. -Además aquí no podemos platicar muy bien. Anda, sexy, terminate eso y vamos al mirador- Le guiñó un ojo al tiempo que acercaba la mano al trasero de su amigo para darle una palmada "amigable".

Pan comido, así fue tener que adivinar la razón de la ahora mortalidad de Hyde. Sólo bastaba que se conociera la situación y listo, sacabas todo más rápido que a la velocidad de la luz. No le dio tiempo ni para separar los labios y hablar, para tener la copa llena de nuevo. Visualizó primero la copa, después a Hyde y de nuevo la copa. Suspiró y sabía que no tenía escapatoria, por lo que la tomó y bebió lo más rápido que pudo el vino. Con suerte no estaba “picado” como Hyde y eso era bastante bueno.

Casi se ahoga cuando bebía el vino y sintió la nalgada. Justo terminó de beber y se rió al recordar de donde provenía el “sexy”. Puso la copa de nuevo sobre la superficie de madera. –Terminé. —Anunció lo obvio y miró a Hyde. —Vayamos al mirador, pero no me palmees el trasero así. —“advirtió” sin sonar del todo serio pues aún tenía la sonrisa por las ocurrencias de Hyde. Al finalizar, se dispuso a ponerse de pie para así poder irse junto con el vocal directo al famoso mirador…

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