Arriba en las alturas -Gackt-

Hace tanto que no se paseaban por ahí, caminaron a través de la ciudad hasta salir de ella y llegar al mirador. Ese lugar en las alturas desde donde podían verse todas las luces y todo lo que rodeaba a Metropolis. A su lado caminaban su hijo de 7 años, Akira y Gackt. Llevaba al primero tomado de la mano. Y después de una larga y pesada subida, ya que no quisieron subir por el teleférico, llegaron a la construcción en la cima. Akira se soltó de su mano y corrió hacia una parte en donde habían un par de juegos. Lo siguieron con calma. Al llegar ahí invitó a su acompañante a sentarse a su lado en una banquita y observó todo su alrededor. Eran casi las cuatro de la tarde.

Sacó una cajetilla de cigarros del bolsillo interno de su chaqueta, tomó uno y lo encendió. Sacó el humo lentamente. Se suponía que lo había dejado, pero cuando estaba ansioso volvía a caer en la tentación, más no había remedio había fumado toda su vida y eso ya eran demasiados años. Además, no había daño posible, a veces reía irónico de las leyendas en las cajas. Le ofreció la cajetilla a Gackt. El lugar estaba desierto, la verdad era que el clima estaba bien, no para él que odiaba el sol y el calor, pero quizás para otras personas si. Así que se le hizo raro que no hubiera mucha actividad por ahí. Rebuscó en su memoria por si algo se había olvidado, algún evento, alguna barata en una tienda, pero no encontró nada. Observó a su hijo columpiarse cada vez más alto. "Mira papá! Puedo volar!" le gritaba emocionado y él se limitaba a sonreír.

Miró a Gackt. En parte había querido salir para platicar con el menor, "primeras impresiones". Le sonrió después de que otra bocanada de humo salió de su boca. -¿Y?-

Siguió a Hyde hasta la cima completamente relajado, no estaba cansado o algo así, estaba acostumbrado al ejercicio a pesar de su pereza. Una vez que estuvieron arriba miró a su alrededor maravillándose por la increíble vista.

Se sentó junto al mayor mientras veía como el pequeño Akira ir hacia aquellos juegos, además de todo era un niño bastante enérgico. Sonrió antes de negar ante el ofrecimiento de Hyde. - Gracias - Se apoyó en el respaldo con los brazos estirados y dejó caer su cabeza hacia atrás, cerró los ojos un momento. Una suave brisa corría y mecía ligeramente algunos de sus mechones de cabello. Eso era relajante sin duda.

Se incorporó pronto al oír la voz del castaño a su lado. Sabía a lo que se refería. Suspiró y miró una vez más al niño a lo lejos. - Que puedo decir... tu hijo es... un gran niño. Inteligente, amable, agradable... A fin de cuentas ¿no son todos los niños así?... curiosos, risueños... - Sonrió apenas y miró a su acompañante. - Me sorprende lo inteligente que es... ¿seguro no eres muy duro con él? - Bromeó soltando una carcajada sin dejar de admirar a aquel personaje que estaba a su lado.

Se rió también escuchando con agrado lo que el otro decía sobre Akira. Le daba ánimos. No había sido nada fácil sacarlo adelante él solo. Aunque su inteligencia también llegaba a sorprenderle y más por la falta de una persona capacitada con ellos. Todavía no se había aventurado a contratarle un tutor o enviarlo al colegio. Todo era mérito del pequeño, a veces le acompañaba a leerle libros sobre varios temas, le había enseñado a escribir y ya leía muy bien.

Tiró las cenizas de su cigarrillo al piso. Akira se había bajado del columpio y se tiraba una y otra vez de una resbaladilla. Negó con la cabeza. -Si supieras que lo que hago es poco, creo que está en la edad en que absorbe de todo. Cuando estuvimos de gira lo llevé conmigo y tendía a repetir lo que otras personas decían en otros idiomas. Y parece que le divertía el hecho de no entender e igual hablar como ellos- Rió una vez más dando una calada lenta al cigarro.

Tenía la vista fija en Akira. Giró a ver a Gackt y le sonrió. -Apuesto a que él está muy emocionado y contento de conocerte-

Asintió apenas y ahora se dedicó a observar al pequeño Akira. Suspiró y resopló de pronto bajando la vista antes de cruzarse de brazos y acomodarse apenas en su lugar.

- Debo admitir que es extraño... - Se mantuvo en silencio un momento y luego miró a Hyde reanudando sus palabras. - Es extraño para mi el hecho de compartir con un niño, ya sabes... no es algo que haga comúnmente en el día a día, pero no me quejo... no sé si será porque es tu hijo o por la personalidad que él tiene lo que me atrae y me causa interés. Como te dije... me parece tan inteligente que me da curiosidad lo que será de él en un futuro, seguro logra grandes cosas - Habló de manera tranquila y suave como si de pronto sintiera nostalgia de lo que él mismo había hecho con su niñez.

Cruzó las piernas y estiró los brazos hacia adelante para luego pasar ambas manos tras su nuca, de nueva cuenta miró al pequeño hijo de su "amigo" y sonrió. - ¿Recuerdas a Kanata Hongo?, creo que él fue el único niño con el que realmente me llevé bien antes - Se alzó de hombros como restandole importancia al asunto.

Le miró con una sonrisa. Si recordaba a Kanata y volvió a sonreír quizás ahora por recordar aquel tiempo. También cruzó las piernas apoyándose en el respaldo después de guardar en la cajetilla la colilla de su cigarro. Suspiró dando un vistazo a su hijo que de pronto venía corriendo en dirección a ellos. -¿Crees que tiene alguna influencia el hecho de que sea mi hijo?-

Miró a Gackt con una sonrisa más amplia al momento que Akira llegaba y se sentaba en medio de ambos.

Ak: -¿Puedo entrar al mirador?-

El niño miró de forma implorante a Hyde, a pesar de que sabía que diría que si. Levantó la mirada hacia Gackt y luego volvió a ver a su papá. -Si, en un momento te alcanzamos- Akira sonrió satisfecho y emprendió la huída hasta el mirador. Cuando volvieron a quedarse solos y sin que despegara la vista de su hijo continuó hablando. -Y Gackt...- Hizo una pausa como si de repente se hubiese arrepentido de decir lo que iba a decir pero ya lo había dicho (?). Suspiró volviendo su vista a su acompañante. -No sé... ¿Crees que te agradaría esa vida? Quiero decir, compartir tu tiempo con un niño...- Soltó una risa y se regañó por lo tonto que había sonado aquello.

Miró hacia arriba como pensando en aquella pregunta y luego movió la cabeza de un lado a otro apenas como queriendo decir un 'No lo sé' 'Quien sabe...', algo así.
Sonrió al ver a Akira entre ambos sobre la banca y más por la forma en que le pedía a Hyde si podía ir al mirador.

Observó al castaño cuando este le llamó, esperó sintiéndose más curioso al momento en que hizo una pausa y bajó los brazos al igual que la pierna que tenía sobre la otra sentándose de manera más recta en el lugar.

Se cruzó de brazos e hizo una pequeña mueca pensando bien en que responder ante eso. ¿Vivir esa vida?... jamás había considerado tener en su vida a un niño, no hasta el momento. Suspiró y pestañeó un par de veces con suma calma. - No te voy a mentir... no puedo asegurar nada, tendría que simplemente vivir aquello. Sólo luego de un tiempo tendría claro que se siente ser padre o algo así - Frunció el ceño riendo divertido al imaginarse a él mismo en rol de padre. - Ahora... actualmente no me consideraría un papá ejemplar... lo que menos tengo es tiempo... lo que si tengo claro sería que si tuviera hijo no la pasaría muy bien conmigo... - No... no había captado del todo la intención de la pregunta que el mayor había hecho, pero tampoco es que le diera una negativa a 'Ese tipo de vida'.

Sonrió y no pudo evitar reír con fuerza luego de que Gackt había dicho todo eso. Más bien lo había dejado peor de confundido pero creía que el punto estaba entendido. Puso una mano en el hombro del más alto y dio un par de palmaditas. -Hace ocho años pensaba justamente igual que tú- Acarició su hombro un poco sin dejar de sonreír. Quizás también reía por el nerviosismo de haberse atrevido a preguntarle aquello.

Aunque todo podía pasar, de todas formas le daba gusto tener una idea de como se sentiría Gackt en esa situación. -¿Por qué crees que no la pasaría bien contigo? Yo la paso bien contigo- Preguntó con calma aún sonriendo al final.

-No es tan malo cuando lo vives. Tengo el privilegio de que Akira es un niño muy autosuficiente, el tiempo que me ocupa es el que le brindo para estar con él como ahora. Ya no reclama atención en otros aspectos.- Nuevamente una risa se apoderó de él. -Ya casi tiene ocho- Levantó una ceja mirándole con una expresión de fingida presunción de lo grande que estaba su hijo.

Acompañó a su risa imitándole. Era verdad, hace ocho años Hyde había tenido que asumir el ser padre y no pudo evitar preguntarse que tan difícil había sido aquello.

- Es diferente... - Negó con diversión. - Tu ya no eres un niño... y bueno, ya sabes... llevamos una relación bastante extraña - Respiró hondo no quiero profundizar en aquel tema. - Un niño... no lo sé, no todos son iguales. Al menos tu has sido de cierta forma afortunado, yo soy exigente y riguroso... - Soltó una carcajada ante el frustrado intento de explicarse.

- Como sea... será algo que el tiempo dirá - Miró hacia la dirección en donde Akira había ido.
No entendía porque ese tema se le hacía tan complicado y mucho menos el hecho de que no pudiera explicarlo por completo, tenía una idea en la cabeza, sólo no sabía como expresarla. - Tal vez considero que necesitará mucha atención porque yo requiero de ella... ¿quizás? - Le miró con curiosidad y atención, pero pronto se relajó y sonrió.

-¿Una relación extraña?- Preguntó inmediatamente después de que Gackt terminara de hablar, no porque hubiera reaccionado lento, sino porque no estaba seguro de querer preguntar si de todas maneras sabía a lo que se refería. Suspiró. Y antes de que Gackt dijera nada, habló de nuevo. -Yo puedo darle atención a ambos- Rió divertido una vez más, sin desviar la mirada de su compañero.

Y después de analizar lo que había dicho giró la cabeza en dirección opuesta. -Quiero decir, que... en un caso así, puede que no estés solo. Por ejemplo, yo en su momento tuve a Tetsu apoyándome.- Soltó una risita nerviosa, eso tampoco había sido un comentario muy atinado.

Regresó su vista a Gackt. -Quieres ver el mirador? Es un espectáculo digno de verse- Sugirió intentando cambiar el tema, además no era bueno dejar tanto tiempo solo a su hijo. Se puso de pie. -Vamos- Se adelantó un par de pasos mirando a su amigo después esperando a que lo acompañara.

Sonrió ladino a la primera pregunta, pero se mantuvo en silencio. Luego sonrió más ampliamente ante lo dicho a continuación y prolongó ese silencio.
Suspiró luego, claro... Hyde y Tetsu habían tenido una relación o algo así, pensó mirando hacia otra dirección. Sería fantástico sentirse así con alguien. En oportunidades pensó que podía sentir eso, pero estaba completamente equivocado, aún no tenía aquella "experiencia".

Le miró de nueva cuenta y asintió. - Vamos - Se puso de pie y caminó hasta llegar al lado del castaño. Comenzó a buscar a Akira, pero no lograba verlo, frunció ligeramente el ceño. - ¿Y Akira? - Miró a su compañero.
Seguramente estaba jugando por ahí, cosas de niños. - Cuida mejor a tu hijo... - Dijo de pronto con diversión en una evidente broma.
Sonaba tan extraño decir aquellas cosas. "Hyde... tu hijo" Rió para si mismo y negó. ¿En qué cosas estaba pensando? ... sólo eran tonterías.

Llegaron hasta la construcción que hacía de mirador. Todas y cada una de sus paredes eran de cristal, un monumento transparente desde donde se podía ver toda la ciudad y de noche perdérselo era una tontería. Luego de escuchar a Gackt le miró también divertido y observó a su alrededor en busca de su hijo. Era verdad, no estaba por ahí.

Lo bueno era que no había mucha gente, caminó por uno de los pasillos hasta darse cuenta de que al menos ahí abajo no estaba. De pronto, discretamente tomó la mano de Gackt y lo guió hacia unas escaleras por las que lo obligó a subir hasta la parte más alta. Y ahí al fondo junto a una de las ventanas por las que podía verse el sol escondiéndose detectó al pequeño.

Estaba tranquilamente de pie junto al cristal y miraba el cielo fijamente. Hyde se detuvo antes de acercarse pero Akira volteó a verlos de inmediato. -Hola papá, ya casi sale la luna. Pero sale del otro lado ¿verdad?-

El niño se alejó de la ventana y se acercó a Hyde para abrazarlo con cariño. -Si...- Apenas respondió mirando a Gackt. -Quieres quedarte hasta que salga la luna?- Le preguntó al pequeño y este asintió con la cabeza. -Está bien pero ya no te alejes de mi, ¿ok?- Le revolvió el cabello y ahora Akira negaba. Señaló un lugar libre cerca del lado por donde salía la luna e invitó a Gackt.